Cicatrices de acné

Para mejorar las marcas y cicatrices del acné contamos con diversas técnicas. Elegir una u otra depende, en gran medida, del tipo de cicatriz.

Las más comunes son las cicatrices atróficas. Aparecen por pérdida del tejido colágeno y se localizan frecuentemente en el área facial.  

No existe ningún tratamiento único que las borre, pero sí podemos conseguir atenuarlas o difuminarlas muchísimo con una combinación de mecanismos de acción que actúen sinérgicamente entre sí. Son múltiples los estudios en los que se ha demostrado una mayor efectividad de los tratamientos combinados en las cicatrices de acné.

  Generalmente recomendamos combinar cuatro tratamientos, todos ellos con probada efectividad para controlar y mejorar el acné y las marcas de acné: a) Redensificación con ácido hialurónico, b) PRP (Plasma Rico en Plaquetas), c) Dermalinfusion, d) Morpheus 8.

Ninguno de los tratamientos anteriores es 100% efectivo cuando se aplica aisladamente. Es decir, empleados como terapia única producen una mejoría discreta, o moderada en el mejor de los casos. Deben combinarse con otras herramientas entre sí para obtener los mejores resultados. Básicamente buscamos tratamientos que de alguna manera hagan lo mismo o sirvan para lo mismo, pero de diferente manera y con distintos mecanismos de acción, para encontrar sinergias, y una mayor efectividad y resultados.

 Redensificación con ácido hialurónico

En este tratamiento inyectamos un ácido hialurónico muy suave (RHA1)  para levantar las cicatrices hundidas. Además, utilizamos Redensity I en toda la zona para activar las funciones de las células de la piel proporcionando una mejora en textura, luminosidad, elasticidad e hidratación. Como el ácido hialurónico es no reticulado, no aporta volumen y no hincha la cara. Simplemente va a hidratar y mejorar la piel, y a rellenar las depresiones más marcadas. Este ácido hialurónico es prácticamente igual al que genera la piel de forma natural. Además de ácido hialurónico posee un complejo dermoreestructurante a base de aminoácidos, antioxidantes, minerales y vitaminas que actúa como revitalizante, estimulando el metabolismo celular y permitiendo que la piel recupere sus propiedades viscoelásticas, estropeadas por las marcas cicatriciales del acné.

La redensificación es un protocolo en el que se recomiendan total de tres sesiones, espaciadas entre 3 y 8 semanas entre sí.

PRP

El plasma rico en plaquetas (PRP), contiene una gran cantidad de factores de crecimiento. Los factores de crecimiento tienen una acción regeneradora en los tejidos. El plasma rico en plaquetas favorece la síntesis de colágeno, que es la molécula más dañada en cualquier cicatriz. En el caso de las cicatrices atróficas del acné, potencia que la dermis aumente su grosor y rellene parcialmente la pérdida de sustancia de la depresión.

Al igual que el tratamiento anterior, el PRP es un protocolo en el que se recomiendan total de tres sesiones, espaciadas entre 3 y 8 semanas entre sí.

Dermalinfusion

Es el tratamiento más suave y agradable de todos, dado que no hay agujas. Dermalinfusion es un tratamiento cutáneo avanzado no invasivo. Consigue una limpieza increíble de la piel, una renovación celular completa de la epidermis (sin que la piel se descame como en un peeling), a la vez que se introduce en la piel principios activos concretos e individualizados según tus necesidades. Esto optimiza el volumen, la hidratación, la textura y el tono de la piel.

Su cabezal con punta de diamante realiza una dermoabrasión o peeling suave que abre los poros y elimina las capas muertas de la piel, siendo infusionada a la vez con el serum Clarify MD habitualmente. Al ejercer fricción sobre la piel,  se genera una muy leve erosión en la epidermis con el fin de estimular la reepitelialización secundaria y la remodelación del colÁgeno.

Dermalinfusion permite extraer toda la suciedad de la piel al instante, revelando una piel luminosa, renovada, hidratada, con un 70% más de volumen y con un efecto de piel de seda.

  Recomendamos generalmente 1 sesión cada 2 o 3 meses.

  Morpheus

La radiofrecuencia fraccionada que aplica este dispositivo en las capas más profundas de la dermis favorece la neocolagénesis, es decir, la producción de colágeno y elastina. Esto estimula intensamente la contracción de la piel de forma que las cicatrices y marcas de acné se hacen más pequeñas y se rellenan de forma natural. Los primeros resultados son ya visibles durante los primeros días, donde empieza a notarse la reducción de las marcas de acné.  Los resultados van mejorando, y hacia la 3ª semana ya se nota apreciablemente. La piel continúa mejorando durante los primeros 3 meses después del tratamiento. Durante los primeros días es normal que la piel esté enrojecida (eritema) y con una cierto hinchazón (edema). También es normal que durante unos días aparezcan pequeñas costras. Esto forma parte de curación normal y no debe asustarte. Por esto es un tratamiento que no debe hacerse en verano.

Al igual que los tratamientos anteriores, se recomiendan 3 sesiones, separadas entre sí de 3 a 6 semanas.